4ta Parte. Compresión Lectora: Estrategias para mejorar la comprensión lectora
Osmel A. Rivas Contreras
En esta cuarta entrega de nuestro curso Comprensión Lectora, abordaremos otro aspecto fundamental de la comprensión lectora, y creo que la mejor forma de entender los objetivos de esta Unidad está en responder a la siguiente interrogante: ¿cómo se logra la comprensión de un texto?
Una de las mejores formas de comprender un texto consiste en saber identificar las ideas principales, secundarias y los detalles que complementan a ésta, así como las estructuras que el autor emplea para organizar y expresar sus ideas.
Estas son algunas preguntas de carácter general que nos ayudará a ubicar las ideas principales y secundarias del texto, así como su estructura y secuencia: ¿Dónde se localiza la idea principal?; ¿Cuál es exactamente la idea principal?; ¿Cuáles son los detalles más importantes que acompañan a la idea principal?; ¿Dónde se localizan?; ¿Qué tipo de organización utiliza el autor?; ¿Es coherente dicha organización?
Para lograr una mejor comprensión se recomienda resumir en una idea general todo el texto y asegurarse de que se responde a la pregunta ¿Qué dice? Luego se extrae la idea fundamental de cada sección, las ideas principales de cada párrafo y detalles que la van acompañando, para finalmente identificar la estructura organizativa del texto, utilizando como ayuda las preguntas ya antes descritas.
Idea Principal
Todo texto contiene una idea principal conectada a unas ideas secundarias o detalles. Se expresa en forma de generalización y viene a ser el resumen del texto o párrafo completo. La comprensión ocurre cuando se logra captar dicha idea, aun cuando se olvide mucho de los detalles que la acompañan.
Cuando se lee un texto por vez primera, es importante tratar de localizarla; normalmente suele aparecer en una frase más o menos explícita, aunque algunos prefieren expresarla de forma no explícita para que sea el propio lector quien la descubra. Cada autor tiene su propio estilo: unos la presenta al comienzo del texto o del párrafo; algunos prefieren hacerlo en el medio y otros al final.
Para lograr identificar la idea principal se debe, entre otras cosas: a) localizar la frase clave o resumen que algunos autores incluyen en su texto; b) tomar nota de lo que se va leyendo. Anotar los conceptos principales hace de la lectura más activa y ayuda a localizar las ideas centrales de un texto. (Esto debe hacerse después de una lectura superficial y exploratoria, especialmente cuando se aborda el contenido de un texto por primera vez).
Para comprobar si se ha identificado correctamente la idea principal de un texto, lo mejor es transformarlo en pregunta; si la frase o párrafo que se ha localizado responde a la pregunta, de seguro se ha descubierto acertadamente.
Las ideas secundarias y los detalles importantes
Las Ideas Secundarias y los Detalles Importantes son los aspectos de un texto que dan credibilidad a la idea principal. La cantidad de detalles que se capten será un indicador de la calidad de la comprensión lectora. Sin embargo, no deben emplearse mucho tiempo en retenerlos pues esto hace que la idea principal se diluya.
Entorno a la idea principal, los autores suelen colocar las ideas o detalles que la adornan; dichos detalles posiblemente no tengan la misma importancia pero realzan y hace más comprensible la idea principal. El trabajo del lector consiste en descubrir y reconocer los datos que conforman, explican, aclaran y completan la idea principal, así como diferenciar entre hechos sobresalientes que ayudan a la comprensión de un texto. A continuación, algunos ejemplos sobre cómo identificar las ideas secundarias.
Descripciones
Los autores complementan la idea principal con descripciones que facilitan al lector una imagen visual del texto.
Hechos
El autor la acompaña con hechos concretos o incluso estadísticas para explicar y definir de una manera más concreta la idea principal.
Razones
Los autores aportan razones que justifican la idea principal, o la explican.
Es bueno recordar que estas ideas o detalles secundarios no tienen la misma importancia. La diferencia entre las ideas secundarias y los detalles es que, en principio, las primeras acompañan a las ideas principales, mientras que los detalles menores aclaran o ilustra algunas ideas secundarias.
La estructura de un texto
La Estructura de un Texto es la forma cómo el autor proyecta la información en su composición, así como su secuencia lógica: apartados, sub-apartados, clasificaciones, etc. La habilidad de identificar la secuencia básica de un texto es el mejor modo de seguir la secuencia de pensamiento del autor. La identificación de la estructura del texto, así como la secuencia del pensamiento del autor, contribuye a una mejor comprensión y retención de la información.
Los autores suelen utilizar varias formas de organización de un texto que en ocasiones resulta fácilmente reconocible. Así, por ejemplo están:
Definiciones y terminologías
Cada disciplina científica o tecnológica tiene una jerga que debe dominarse para comprender los textos que le son propios. Muchos problemas de comprensión se deben principalmente al desconocimiento de los conceptos, terminologías y definiciones que configuran en su conjunto un tema determinado. Los autores inician un párrafo ofreciendo una definición o concepto clave y a continuación amplían la explicación de lo que significa.
Clasificaciones y listas
Otros organizan el texto entorno a una clasificación que va analizando o explicando. Es utilizado regularmente para categorizar los contenidos en distintos apartados. Es muy empleado en textos técnicos y científicos donde se expone con claridad las diversas categorías y sub-categorías sobre un tópico en específico, así como la relación entre ellas.
Relaciones causa y efecto
Mediante esta estructura el autor explica las causas que originaron ciertos fenómenos. Algunos inician su relato explicando primero los efectos para luego determinar las causas que los han producido. Existen palabras que ayudan a identificar este tipo de relación: causas (factores, razones) o efectos (consecuencia, resultado, productos).
Ejemplos
Ayuda a establecer un puente entre los conceptos abstractos y las ilustraciones concretas. Son fundamentales para comprender teorías y abstracciones, y pueden acompañar a las clasificaciones, definiciones, relaciones causa-efecto, etc.
Comparaciones y contrastes
El autor compara o contrasta unas ideas con otras para buscar diferencias o similitudes. Es muy utilizado para ayudar al lector a captar conceptos difíciles de transmitir. En el caso de los contrastes el autor describe sólo las diferencias entre dos cosas utilizando términos como “y” o “versus”.
Secuencias
Se utiliza para presentar una serie de acontecimientos de forma cronológica. En este caso, se emplea encabezamientos que facilitan la comprensión de lo que relata, llevando un orden temporal o lógico.
Todas estas estructuras o modelos de presentación de textos no son excluyentes sino que pueden ser utilizados de forma conjunta, dependiendo de lo que el autor desea expresar. Ej. Un autor puede comparar dos culturas y hacerlo de forma secuencial, señalando los inicios, desarrollos y el declive.
Claves para profundizar un texto
En lo que concierne a las Claves para Profundizar un texto, ir más allá de las palabras escritas suponen, por parte del lector, realizar dos tareas: a) interpretar los significados que trata de transmitir el autor: la idea principal de un texto o párrafo ayuda a comprender el mensaje literal, pero también puede haber un mensaje implícito que el lector debe tratar de captar; b) realizar preguntas sobre lo que el autor dice: para completar el ciclo de la lectura, el lector debe preguntarse no sólo por las ideas principales y secuenciales, sino por el mensaje que ha querido transmitir el autor.
Si desean acceder a la versión audiovisual del presente material, podrán hacerlo haciendo click en el siguiente link.
Referencias
OCEANO. (s.f.) Máster Biblioteca Práctica de Comunicación: Lectura y Memorización. (t.III). Madrid, España.
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